En el centro de Málaga y el casco antiguo hay 2 castillos muy bien conservados. Puede visitar ambos castillos sin necesidad de un guía. La Alcazaba de Málaga, que se remonta a la época de los moros, y el Castillo de Gibralfaro, que también se construyó en la época árabe y se amplió tras la reconquista española. El Palacio Real de la Alcazaba en Málaga, iniciado en el siglo XI, es el edificio más importante de la época árabe. Hoy en día encontramos en él el Museo Arqueológico con numerosas e interesantes exposiciones. El domingo la entrada es gratuita (ya no hay propina secreta).
Cerca de la Alcazaba de Málaga encontramos el Castillo de Gibralfaro. Sobre el palacio original, que probablemente fue construido por los fenicios, el califa granadino Yasuf I hizo construir en el siglo XIV la fortaleza que hoy podemos visitar. Dos torres están conectadas por un pasillo con la Alcazaba. La vista de Málaga y del puerto es increíblemente bella. Un túnel conduce a un ascensor que sube a la Alcazaba.